3 de julio de 2012.- Los ingresos del 91 por
ciento de los ciudadanos griegos se han reducido tras el estallido de una
crisis capitalista sin precedentes.
Más del 50 por ciento de la población en Grecia
está al borde de la pobreza y el panorama puede ser aún más sombrío, advierte
la Confederación Sindical Internacional (CSI).
En esa organización temen una “explosión
social”. La secretaria general de la CSI, Sharan Burrow, explicó que un
estallido se vuelve probable “cuando una nación pierde la esperanza y su fe en
las instituciones democráticas vacila”.
Burrow, quien se encuentra en Atenas para
presentar los resultados de un estudio sobre la situación de los empleados en
Europa, dijo que se “encontró gente asustada, gente que no quiere tener hijos
porque no sabe cómo criarlos”.
Además, la sindicalista británica aseguró que
los expertos del Fondo Monetario Internacional (FMI), no son conscientes del
peligro que existe en Grecia, ya que “solo piensan en cifras”.
“Dado que el 50 por ciento de los jóvenes en
Grecia está sin empleo y que el 65 por ciento de la población está al borde de
la pobreza, el FMI y la Unión Europea deben pensar de nuevo sobre la política que
aconsejaron”, señaló la secretaria general de laConfederación Sindical
Internacional. De acuerdo con el estudio presentado por la CSI, los
ingresos de un 91 por ciento de los griegos se han visto reducidos desde el
estallido de la crisis capitalista.
En ese contexto, pidió el restablecimiento del
salario mínimo y que las pensiones recuperen sus niveles anteriores para que
“la gente pueda vivir con dignidad”.